Archivo de la categoría: 1- RICARDO ROBLEDO

Una lucha entre la razón y la decadencia de los reaccionarios

Por: Equipo Colarebo Colombia

En la prehistoria y también en la historia, ocurrieron sucesos que determinaron el desarrollo de la civilización y de las sociedades.

Por ejemplo, una de las causas, en las teorías que buscar explicar la extinción de los neardentales, es que estos fueron asesinados por los homo sapiens en la disputa de la competencia por alimentos. Hoy en día, algunas poblaciones asiáticas conservan de 1 a 4 porciento de ADN neardental.

Para aprender de la experiencia de lo ocurrido más recientemente, es bueno aprovechar y como advertencia  los aportes del profesor de la universidad Autónoma de Madrid, Mario Taibo, en la conferencia de presentación de su obra “Repensar la anarquía”, en la que, entre otros, hace este comentario con respecto a la Segunda Guerra mundial y a sus consecuencias:

“Hace unos años se tradujo al castellano un libro de un periodista alemán llamado Carl Amery, el libro se titula “Auswitchz ¿Comienza el Siglo XXI? Hitler como precursor”. La tesis principal que maneja Amery en esa obra, señala que estaríamos muy equivocados si concluyésemos que las políticas que abrazaron los nazis alemanes ochenta años atrás, remiten a un momento histórico singularísimo, coyuntural y, por ello, afortunadamente irrepetible.

Amery nos invita, antes bien, a estudiar en detalle esas políticas; ¿por qué?, porque bien pueden reaparecer en los años venideros, no defendidas ahora por ultra marginales grupos neonazis, sino postuladas por algunos de los principales centros de poder político y económico, cada vez más conscientes de la escasez que se avecina y cada vez más firmemente decididos a reservar esos recursos escasos en unas pocas manos, en virtud de un proyecto de eco-fascismo, de darwinismo social militarizado.

Creo yo que buena parte de las políticas que defienden los sucesivos presidentes de los Estados Unidos, hunden sus raíces en un proyecto de esta naturaleza; como creo yo, por proponer otro ejemplo, que muchas de las medidas que la unión europea aplica de un tiempo a esta parte, a los inmigrantes pobres que llegan a nuestras costas y aeropuertos, de nuevo hunden sus raíces en un proyecto de esta naturaleza.”

Es importante también, según se deduce del título, la caracterización que hace el profesor Göran Therbon acerca de los reaccionarios actuales, en su conferencia “La izquierda mundial, la nueva derecha radical y las grandes batallas del Siglo XXI”, en la que toca estos aspectos:

En la actualidad existen dos derechas: la tradicional y una nueva derecha radical con significado en la política; antes existían pequeños grupos neofascistas al margen del sistema político y de la historia; la nueva derecha radical comenzó con el neoliberalismo de los años 70; una parte del programa explícito del  neoliberalismo fue lo que surgió de lo que interpretó como la crisis de la democracia, ya que consideraban que había demasiada democracia en el mundo, sobrecargada por demandas populares, y entonces, vio necesario desarrollar mecanismos y regulaciones para limitar la influencia popular en la política; comenzó en Chile con su primer gran victoria, el golpe militar en el 73.

Esta nueva derecha creció a causa del abandono de las clases populares por la izquierda cultural en el período de 1990 a 2000, con la propuesta de la tercera vía, la quiebra de la izquierda radical y la pérdida de su apoyo, quedó desorientada y desmoralizada por la implosión de la URSS; la nueva derecha encuentra otro impulso en la xenofobia creada por la inmigración de masas, la cual ha crecido mucho en las dos últimas décadas por las guerras imperialistas devastadoras en el medio oriente, Pakistán, Afganistán, Irak, Líbano, Somalia, Libia; otro factor ha sido la crisis en el norte, en el 2008, debido al malestar generalizado con el manejo dado por las clases tradicionales.  

Los líderes de la nueva derecha radical son empresarios, personajes de los medios, políticos por fuera de la burguesía tradicional. La base social de la nueva derecha es una conquista de la parte de la base histórica social de la izquierda, así como de la pequeña burguesía de derecha; además, canalizan con las iglesias la oposición a la ideología de género y al feminismo, impulsadas por las corrientes más conservadoras

El nuevo fascismo es diferente al de Hitler y Mussolini y hay que dejar en claro las diferencias; el fascismo histórico fue jerárquico y explícitamente anti democrático; en la primera mitad del Siglo XX, perdió con la derecha tradicional, excepto en Italia y Alemania.

La nueva derecha radical es una expresión de la postmodernidad y una reacción contra el modernismo global y cultural; en realidad no representa una amenaza seria a la democracia, como Hitler y Mussolini, porque no tiene la suficiente fuerza social para ello.

Los únicos fascistas semejantes a Hitler y Mussolini son los sionistas actuales, que son racistas, genocidas e imperialistas.

El punto débil de la derecha radical es la brecha entre la base popular o desamparada y su arraigo en la ideología reaccionaria y su neoliberalismo económico. Pero a la base popular no le preocupa la democracia, los opositores de la derecha no han logrado disminuir los votos a favor. La izquierda debe recuperar su base social perdida, para ello tiene que diferenciar la confrontación con los líderes de la derecha radical y las relaciones con sus seguidores, para quienes es necesario expresar respeto, hacer foros de discusión, dar argumentos de clase, aplicar una metodología cotidiana, crear alternativas de empoderamiento popular.

La lucha entre la izquierda y la derecha se da en estos aspectos:

  1. Cómo sobrevivir a la crisis climática
  2. Cómo manejar pacíficamente el declive político económico de occidente y la transición a un mundo multipolar
  3. Cómo reducir las desigualdades en la humanidad, profundizadas por el neoliberalismo y amenazadas con agravarse por la Inteligencia Artificial.

(Hasta aquí los comentarios del profesor Thorben)

De estas dos conferencias se resalta cómo la ideología de la ultraderecha del Siglo XXI, se inspiró en los campos de concentración nazis de la Segunda Guerra Mundial. Su posición de que hay “mucha democracia” muestra que la diferencia con la izquierda no corresponde a la lucha entre la razón y un error en el entendimiento de una realidad objetiva, sino que es el enfrentamiento con un proyecto que se quiere imponer irracionalmente a los pueblos del mundo.

Por eso, los medios se llenan de falsas noticias por fuera de toda lógica y mienten desvergonzadamente. Así es como la política se va llenando de personajillos de poca monta, que no saben de la seriedad que implica la organización de una sociedad; son los reguetoneros de la política, con la misma calidad del contenido de estas creaciones y que no muestran ninguna lógica humanista para un futuro mejor. Una evidencia de su decadencia e inevitable hundimiento.

La ultraderecha es minoritaria, asesina, antidemocrática y neoliberal. Con ellos no hay discusión reflexiva con respecto a la democracia, leyes constitucionales, acuerdos unilaterales de estado y nunca la habrá con personas que creen que hay demasiada democracia en la sociedad, su misma democracia burguesa. Y esta terquedad toma formas reales en la política mundial.

Así como los homo sapiens de hace cuarenta mil años no entendieron las razones de los neardentales acerca de su derecho a vivir como especie en la Tierra, los sionistas no aceptan razones ni resoluciones sobre el derecho a la vida del pueblo palestino y actúan como si quisieran borrar cualquier vestigio de su ADN.

Para confirmar habría que preguntarle al Señor Vladimir Putin si la ultraderecha entiende de razones y si respeta acuerdos. También la historia ratifica su catadura traidora, según lo sucedido con Atahualpa, Benkos Biojó, los líderes del movimiento comunero, Rafael Uribe Uribe, Emiliano Zapata, Pancho Villa, Julio Cesar Sandino, Guadalupe Salcedo, en el deseo  de volver trizas los recientes acuerdos de paz en Colombia y sus firmantes, así como una larga lista de traiciones.

Como lo expresó el profesor Therbon, “la izquierda debe recuperar su base social perdida. Para ello tiene que diferenciar la confrontación con los líderes de la derecha radical y las relaciones con sus seguidores, para quienes es necesario expresar respeto, hacer foros de discusión, dar argumentos de clase, aplicar una metodología cotidiana, crear alternativas de empoderamiento popular”. Es a estos a quienes deben dirigirse los debates de la razón y desenmascarar los oscuros proyectos de la ultraderecha radical e irracional.

Esta es una de las reflexiones que en la actualidad tiene que plantearse la izquierda local y en el mundo.

Septiembre 05 de 2024

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RESPALDO TOTAL AL PUEBLO VENEZOLANO

“Qué tiempos son estos en los que tenemos que defender lo obvio”.
(Bertolt Brecht)

Por: Equipo Colarebo Colombia

En Venezuela hay un sistema electoral ampliamente explicado y auditado internacionalmente, así como un concejo nacional electoral con la suficiente solvencia para anunciar los resultados.

Como es lo lógico, ganó las elecciones el candidato que más votos obtuvo y así como resultó un ganador, también hubo perdedores. Una vez más la derecha fracasó en su intento de obtener el respaldo popular para volver al gobierno y desplegaron, también una vez más, su furioso plan de violencia.

A pesar de las reconocidas instancias democráticas, las instituciones tienen que salir ante el mundo a sustentar lo obvio (los resultados) y a rechazar que se imponga lo indefendible (la violencia).

Aunque la lógica de la sinrazón de la derecha está basada en mentiras evidentes, la razón tiene que enfrentarla con firmeza en el concierto mundial, espacio en el que se manipula la opinión y así evitar que se afiancen falsas narrativas en contra del pueblo venezolano y sus instituciones y que se promueva una intervención de las élites que entienden su democracia como el atropello a las naciones y el robo de sus recursos.

Aquellos desde el exterior, ajenos al pueblo venezolano, que sienten que les fueron robadas las elecciones, no hacen más que revivir el colonialismo y la injerencia. Como si los pueblos del mundo no tuvieran el derecho a definir su destino.

Son lo que crean un estilo de democracia en el que, sin votar, dicen: “déjenme decidir quién ganó las elecciones”. Tamaña estupidez. Como si el pueblo venezolano estuviera bajo su tutela.

La lógica de la sinrazón conduce a conclusiones tan extrañas y paradójicas como que el pueblo venezolano se robó a sí mismo las elecciones.
Gloria al bravo pueblo.

Agosto 14 de 2024

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«Todos» atacan al gobierno del cambio

Por: Ricardo Robledo

Que la derecha se vaya contra el gobierno del cambio es apenas de esperar, pero que también se haga desde la izquierda, es algo que debe llamar a reflexiones. Algunas discrepancias se manifiestan, por ejemplo, en que ya se cita a dos asambleas populares, una que denominan pro gobierno y otra independiente.

Ahí van naciendo las divergencias que conducen a divisiones; fraccionamientos que son aprovechados por la derecha para profundizarlos, así sea presentados como supuestas profundas distancias ideológicas y revestidos de organizaciones de izquierda, lo que enreda y hace difícil las diferenciaciones para saber si son amigos o enemigos. En las guerras se ha visto que muchas organizaciones son impulsadas por la derecha bajo banderas populares, que a la postre resultan falsas.

El gobierno y el conjunto de la izquierda deben salirle al paso a toda división, de forma inmediata, porque “es más fácil cruzar un río en su nacimiento.” Ante las discrepancias es saludable el debate para aclarar los objetivos del período y lograr la unidad alrededor de estos. Esto permitirá diferenciar entre aliados y opositores encubiertos. Hay que evitar que los mercenarios políticos se escondan detrás de las críticas de las tendencias populares genuinas y honestas.

Al elegir a Gustavo Petro en la presidencia de Colombia, el pueblo colombiano puso un huevito en un nido de buitres. De ahí surge el llamado del presidente para que lo protejan del estercolero en que está metido y de los que le rodean y acorralan. Estas aves rapaces saben que cuando el pollito saque la cabeza, si no se parece a ellos, lo devorarán.

Por eso lo mantienen limitado y controlado para que no avance. Los discursos de Gustavo Petro son profundos y su esfuerzo es grande, pero su realización es escasa, lo que hace que su gobierno aparezca cubierto por un velo de demagogia. El pueblo todavía no siente los beneficios del cambio.

El pueblo colombiano tiene derecho a condiciones de vida digna y no puede quedar condenado a recibir las migajas que los miembros de las clases dominantes determinen. La organización de la sociedad depende de decisiones que toman las personas. Si la mayoría de la población vive en pobreza, es porque las élites políticas usan los recursos públicos en su propio beneficio.

La oligarquía sabe que está quemada con el pueblo colombiano y que no tiene nada que ofrecerle, por eso aceptan a Gustavo Petro, pero no a tal punto de permitirle que tome caminos autónomos que conduzcan a cambios reales. Unos de estos sectores, como el santismo, tampoco quieren que el presidente pierda el poder con las mafias del narcotráfico, representados en el uribismo.

Por eso, al presidente le dejan dar discursos, pero no le permiten la implementación de sus propuestas y lo rodean de funcionarios enraizados con la vieja clase política para que entorpezcan y controlen para que nada cambie. Mucho se va diluyendo en las buenas intenciones. Son muy fuertes los poderes tradicionales enquistados en las diferentes ramas del estado. Hay que romper la dictadura burguesa.

La narcoderecha ataca al gobierno y la oligarquía los tolera, para que desestabilicen, pero que tampoco se fortalezcan de tal forma que vuelvan al poder. A estos se unen los medios que, desinforman, tergiversan, mienten, crean noticias falsas y escándalos, de manera permanente, para generar en la opinión pública una imagen negativa del gobierno.

No es de extrañar que algunos grupos armados sean promovidos por los intereses desestabilizadores del imperialismo y de otras agencias de inteligencia, tal como lo hacen en el Medio Oriente.

Es urgente conservar la unidad popular y cerrar críticamente filas alrededor del gobierno del cambio para fortalecerlo.

Julio 12 de 2024

Hacia un partido nacional para la lucha de todo el pueblo

Por Eduardo Posada

El propósito de este documento es contribuir a justificar el porqué de la necesidad de un partido nacional, fuerte, capaz de gobernar y de enfrentar a los enemigos. El accionar de pequeños grupos ha sido muy clave en cuanto a la conservación de un ideario de lucha, pero también ha significado un desperdicio de esfuerzos, de recursos y hasta de pérdida de valiosas vidas; igualmente ha sido un mecanismo de cubrimiento ante la represión, así como del sectarismo, del distanciamiento con respecto a la población y a la filosofía y en donde han aflorado algunos brotes de protagonismo oportunista.

Tal fragmentación del movimiento revolucionario no ha permitido la construcción de estrategias, porque estas deben ser de índole nacional para abarcar al conjunto de la sociedad, lo que no está al alcance de pequeños grupos, que terminan encerrados en una visión limitada de la realidad y dando giros alrededor de sus propias políticas, que son de poca trascendencia real.

Se espera que con esto se contribuya a alentar el debate para enfrentar los retos que se tienen presentes, para dar una respuesta a las necesidades del pueblo colombiano y a la continuidad de la vida en el planeta.

Como seres, tenemos que reconocernos existentes en el momento presente, en un territorio, rodeado de personas, en unas circunstancias y un entorno. Para que los seres humanos puedan tener una existencia social, es necesario, entonces, establecer cómo deben ser las relaciones con cada uno de estos aspectos de tiempo, territorio, personas, entorno, para que luego se expresen en políticas, que son acciones acordadas acerca del cómo proceder social; esta es la esencia de una constituyente. Cuando el pueblo participa y es quien define estas relaciones, se convierte en protagónico y en constituyente primario.

Unas propuestas como políticas sociales para tales relaciones en Colombia, podrían ser:

1.  Proteger el derecho que tiene toda persona a vivir en paz, en fraternidad y al pleno disfrute de su existencia con unas condiciones de vida dignas e integrales.

2. Construir una sociedad confiable que le de seguridad al ciudadano en sus derechos, condiciones de vida y lo proteja, hoy y en el futuro. 

3.  Convertir al país en una potencia mundial de la vida.

4.  Construir una sociedad para el pueblo colombiano.

Para lograr que estas políticas se vuelvan realidad, se necesita un partido para influir políticamente en la sociedad colombiana, nacional, fuerte, capaz de gobernar y de enfrentar a sus enemigos, conformado por militantes activistas con disposición para recibir instrucciones y capaces de desplegar su iniciativa para convertirlas en la lucha de todo el pueblo.

Aquellos que se opongan a estas políticas populares, de forma violenta, por medios ilegales, delictivas, fraudulentas o criminales, deberán ser judicializados y castigados. Esto implica desarrollar la inteligencia popular y denunciar a sicarios, corruptos, saboteadores, extorsionistas, narcotraficantes, paramilitares, fleteros, violadores, expendedores de droga, ladrones y a los delincuentes de todas las modalidades.

Es cierto que se vive una crisis civilizatoria. La población mundial ha superados los ocho mil millones de personas; se consumen recursos correspondientes a 1.7 planetas por lo que el modelo actual de desarrollo se hace insostenible; las condiciones laborales se han vuelto precarias; miles de millones de personas viven en el marginamiento, el abandono y la desesperanza; la naturaleza es destruida como hábitat para la vida de todos los seres; las condiciones climáticas se han desequilibrado y afectan a las poblaciones y sus recursos en todo el mundo; los insectos, señores de la polinización, son fumigados sin clemencia; se promueven guerras por los recursos; se hace uso de armas biológicas y químicas contra las personas; se fomenta la drogadicción como forma cruel de controlar a la juventud; se invaden países; se acaban y trivializan culturas; a los organismos internacionales no les interesa parar las guerras ni mitigar el hambre ni combatir las enfermedades; la población migra de un lado para otro huyendo de la miseria; la educación y los valores intelectuales, se desprecian y se combaten; los medios de comunicación mienten a favor de los intereses de élites minoritarias que se benefician de estado de cosas.

La causa principal de todos los males del mundo es el sistema capitalista, depredador de la naturaleza; organización social que ahora agoniza.

Colombia ha sido gobernada por una oligarquía que es una minoría, traidora, violenta, corrupta e incapaz de resolver los grandes problemas del país y de posicionarlo en el concierto mundial para evitar que el país y su población, sean abiertamente afectados por las crisis. No más tristeza en los ojos de niños, madres, ancianos, mujeres, familias y población en general.

Para que Colombia sea potencia mundial de la vida, la producción no debe enfocarse a convertir a la naturaleza en basura orientada al consumismo innecesario; sino, organizarse alrededor de la vida y de lo humano guiados por la bioética y los criterios ambientales.

La crisis también afecta a los miembros de la derecha; igualmente, el cambio los convoca. ¿Porqué no pueden dedicarse a construir un país en paz, junto con el pueblo colombiano?

El pueblo colombiano y los pueblos del mundo, deben lanzarse a la ofensiva en defensa de sus derechos y soberanía. Existe un imperialismo en decadencia, incapaz de responder a todos los frentes de lucha que genera y enfrenta a enemigos hoy poderosos. Los países no pueden ser arrastrados a la debacle mundial por unas minorías que se atraviesan en el florecimiento de los mejores y necesarios valores de fraternidad, colaboración y convivencia de la humanidad y por el derecho a la vida.

Por esto, el pueblo colombiano debe enfocarse a:

a. Derrotar electoralmente a todos sus enemigos políticos

b. Ocupar todos los cargos necesarios para que el estado funcione acorde a sus políticas

c.  Asegurar que sus enemigos políticos nunca más vuelvan al poder.

Mayo 01 de 2024

Con cada escándalo se aclara la lucha del pueblo colombiano

Por: Equipo Colarebo Colombia

Ya se había dicho que el objetivo del presente período era arrebatarles el país político a las mafias del narcotráfico y de la corrupción, que han hundido a todas las instituciones en la criminalidad. Arrebatarlo para que la población pueda expresarse libre y democráticamente sin ser perseguido, maltratado, torturado, asesinado o desaparecido. Labor de limpieza estatal que apenas comienza.

También se había advertido sobre la segunda oleada de políticos, conformada por ese montón de oportunistas que, usando la palabrería y pose de izquierda, sólo aspiran a reemplazar a la narco oligarquía en su forma de hacer la política y en su actitud con respecto a las arcas del estado, tal como se ha visto con los recientes escándalos; apenas ven el momento actual como un nicho de mercado de amplias opciones para el saqueo. El actual gobierno y el pueblo deben estar alerta frente a esto.

Es tal el tamaño de la corrupción que, en cada municipio, concejo y secretaría hay una banda dedicada al desfalco de las instituciones, y en Colombia hay alrededor de 1.101 municipios. Igual ocurre en las 32 gobernaciones. Cada congresista representante de las clases políticas tradicionales, es una punta de lanza de lo ilícito; están en el vértice de la tajada de la torta en que dividen el presupuesto nacional, al que hay que pegarle desbocados mordiscos; son como mineros que buscan la veta de oro para extraerla con toda una infraestructura y logística de alcance internacional, para su grupo, clan o partido; verdaderas expresiones del crimen organizado. Son los encargados de monetizar la palabra política.

Son famosos los 70.000 millones de pesos que se abudinearon del internet para el campo y que luego aparecieron en Miami; también se conocen los casos de “Panamá papers” y paraísos fiscales en donde va a parar la plata robada al pueblo colombiano. Es la forma en que la “gente de bien” se ha enriquecido asaltando las arcas del estado.

El actual gobierno del Pacto Histórico ha sacado a la luz pública la corrupción con denuncias más descarnadas y ha permitido aclarar el significado de la lucha de clases. El punto es: Se apoya a funcionarios corruptos que gobiernan para ellos, que llegan para robar y que continúen con sus fechorías, o se apoya a un gobierno del pueblo para el pueblo, orientado a construir una sociedad para el beneficio de todos, con justicia, acorde con los retos presentes de la nación y ante un sistema mundo capitalista que se desmorona cada día. Hasta que la dignidad se haga costumbre y el cambio sea imparable. La marcha es hacia adelante, de cara al futuro, nunca para atrás.

Mayo 12 de 2024

«En Colombia vamos a volvernos como Venezuela»

Por: Equipo Colarebo Colombia

Ese ha sido el grito de agitación de la derecha en Colombia; unos lo ven, sin mayores análisis, como una desgracia ante la cantidad de personas que han abandonado ese país; pero otros lo vemos como ejemplo y esperanza del bravo pueblo que lucha por su soberanía en medio de inmensas dificultades, tal como sucedió en el pasado cuando se dio la gesta libertadora de Suramérica.

En Venezuela, el comandante Hugo Chávez fue elegido democráticamente como presidente al ganar las elecciones de 1998 con el Movimiento V República y asumió la presidencia el 2 de febrero de 1999. Al perder el poder, la oligarquía venezolana ejecutó los más feroces ataques para entorpecer su gobierno, acciones que continúan en la actualidad.

En Colombia, Gustavo Petro fue elegido democráticamente como presidente al ganar las elecciones del 2022 con la coalición del Pacto Histórico y asumió la presidencia el 7 de agosto del mismo año. Al perder el poder, la narco oligarquía colombiana ha venido ejecutando los más feroces ataques para entorpecer su gobierno, acciones que de seguro continuarán.

La oligarquía venezolana soñaba que volvería al poder cuando el comandante Chávez terminara su periodo constitucional; igual sueña la de Colombia. Pero allá no fue así; el bravo pueblo patriota se afianzó. Luego dieron el golpe de estado el 11 de abril del 2002 y fracasaron. Lo mismo quieren hacer en Colombia.

Después vinieron los atentados, los sabotajes a la infraestructura, calentaron la calle con marchas y guarimbas, los bloqueos, el fomento del paramilitarismo, los llamados a la invasión imperial. Igual viene sucediendo en Colombia y se espera que se profundice.

En Venezuela conformaron la Mesa de la Unidad Democrática, como una coalición de partidos políticos que se oponen a las políticas del Partido Socialista Unido y a sus aliados del Gran Polo Patriótico. Igual, en Medellín, hablan de una mesa de unidad nacional para tumbar al presidente elegido democráticamente, al mismo tiempo que se impulsa el paramilitarismo, se convoca y preparan atentados contra la vida de Petro, de sus funcionarios y de sus seguidores y calientan la calle con marchas.

Todas estas acciones son similitudes que corresponden a la receta del golpe blando de la derecha internacional y que han aplicado en Libia, Yugoeslavia, Siria, Bolivia, Nicaragua, Honduras, Cuba, Brasil, Paraguay, Argentina, Venezuela, Colombia y seguirán aplicando para combatir las luchas de los pueblos del mundo por su libertad y soberanía y derecho a la existencia.

En Colombia vamos a volvernos como Venezuela: un bravo pueblo que lucha por su libertad, soberanía y derecho a la vida.

Palestina y los pueblos del mundo, triunfarán porque sus luchas son históricas, necesarias y justas.

Abril 26 de 2024

A pesar de las protestas, el gobierno del cambio debe mantenerse firme en sus reformas

Por: Equipo Colarebo Colombia

Es necesario establecer un diálogo objetivo con las personas pobres que apoyan a la oposición al gobierno del Pacto Histórico, que es del cambio y que quiere hacer de Colombia una potencia mundial de la vida.

Se resalta lo de objetivo, porque las afirmaciones, cuando son categóricas, no expresan nada, más allá de lo primario, las pasiones o del fanatismo. Esto es lo que se obtiene cuando algunos ciudadanos son preguntados acerca de lo que rechazan del gobierno actual y la respuesta simplemente, es: “todo”; o cuando son llamados a decir qué está haciendo bien el gobierno y contestan: “nada”; o si se disuelven en comentarios calificativos de odio, insultos o de racismo. Son expresiones sin argumentación.

Esto hay que considerarlo con respecto al objetivo del actual periodo, de arrebatarle el país político a las mafias del narcotráfico y de la corrupción, que han sumido a todas las instituciones ¾lógico, con sus funcionarios¾ en la criminalidad; recuperarlas para que el pueblo pueda expresarse libre y democráticamente, sin ser perseguido, maltratado, condenado, torturado, asesinado y desaparecido. Dirección en la que marcha el actual gobierno; propósitos que son irrenunciables.

También es cierto que el mundo cambia y que estamos viviendo una crisis civilizatoria que se expresa en el desempleo, la desesperanza, la incertidumbre, el deterioro ambiental; el modelo capitalista ya no puede garantizarles a las personas desposeídas, los más mínimos ingresos económicos; miles de millones de personas viven en el marginamiento producto del despojo y porque no son importantes para la soberanía del mercado y por tal razón, sobran; son un estorbo y un peligro permanente de estallido social.

Ante esta realidad, el gobierno del cambio lo ha venido haciendo bien en Colombia, preparando el país para los retos futuros y evitando que la población y la economía nacional sean golpeados por esta crisis. El mundo cambia y hay que respaldar las medidas que se vienen tomando. La derecha protesta porque quiere mantener los privilegios de unos cuantos, y son incapaces de interpretar los acontecimientos mundiales desde una visión de fraternidad y aún así, arrastran en sus aventuras a sectores empobrecidos y manipulados.

Ante la crisis, hay dos posiciones: mantener a una minoría con derechos exclusivos o promover la fraternidad y colaboración entre los pueblos del mundo; considerar que hay personas que sobran o reconocerle a todos el derecho a la existencia. Por eso hay élites mundiales interesadas en promover las guerras internacionales y entre connacionales, para deshacerse de la población; guerras que promueven, pero en las que no participan; es parte de la táctica violenta de la derecha local y mundial. Es una lucha entre la vida y la muerte. Elegimos la vida y debe protegerse. El gobierno debe seguir firme en su camino y sus reformas, hasta que la dignidad se haga costumbre.

La fiscalía en Colombia: un cuento infantil

Por: Equipo Colarebo Colombia

Es tan pobre la mentalidad de los funcionarios seleccionados por encargo de los políticos tradicionales, que apenas les alcanza para idearse tramas ingenuas; como la que se imagina un niño para justificarse ante la abuela, involucrando a una tropa de duendes montados en unicornios dorados. Ese cuento de un duendecillo travieso que por Buenaventura entra contrabando en barquitos de papel, no convence. Esa historieta para colorear, no se la creen sino ellos.

Pero lo más grave es que esto devela la debilidad de los entes de control en Colombia, que son aparentemente engañadas con argumentaciones torpes. Y no pasa nada. Pero se espera que algún día, los funcionarios tengan la altura que el pueblo colombiano se merece, en concordancia, para hacer del país una potencia mundial de la vida.

La sociedad colombiana es ultrajada por todo tipo funcionarios que se creen con superpoderes que los facultan para actuar por fuera de la constitución política y de la ley. Por donde el actual gobierno destapa, hay ollas podridas, sean instancias ejecutivas, legislativas, direcciones, ministerios, cuerpos diplomáticos, fuerzas armadas, organismos de control, contratos, concesiones, cortes ¾ ya no tan altas. El país en el la corrupción ya se desbordó de sus “justas proporciones”, tal como la ha oficializado la oligarquía, que tradicionalmente se ha enriquecido a expensas del erario.

Por eso, el actual gobierno es atacado a diario con tipo de artimañas. Se entorpecen las funciones, se riegan mentiras por los medios de comunicación, se manipula la opinión pública, se maquina, se urden intrigas, se efectúan acciones de falsa bandera, se convoca a golpes de estado.

Es retadora y dura la tarea de transformar a Colombia en una sociedad democrática, constitucional y más humana. No hay tiempo que perder ni se pueden dispersas las fuerzas ni los recursos. “La lucha es larga…Comencemos ya” (Camilo Torres Restrepo).

Febrero 28 de 2024

COLOMBIA. HACIA ADELANTE CON EL PACTO HISTORICO

Por: Ricardo Robledo

En las sociedades de clase, la forma de hacer política no se basa en el imperio de la razón, sino en el triunfo deshonesto de las maquinaciones. Lo grave es cuando estas prácticas, se encuentran también en los sectores llamados alternativos o de izquierda. Algo que parece depender de la supuesta naturaleza humana. Es el ethos, la moralidad, la amalgama o el sustrato del que están hechas las personas en la sociedad burguesa y del cual no pueden escapar.  

Uno se transforma transformando lo que quiere transformar y si no transforma, pues no se transforma. Además, los seres reproducen las condiciones que los hicieron surgir, se mueven en el medio que les permite ser exitosos; algo así como la selección natural, la cual puede ser para bien o para mal.  

Por eso, para que las sociedades entiendan que hay autoridad, se tiene que lograr que la población capte que existe lo que tradicionalmente se ha entendido como tal. De ahí que el zar sólo puede ser reemplazado por otro zar; el emperador, por otro emperador; y la oligarquía, por otra oligarquía. Es algo que parece estar en el inconsciente de lo político y que se aprecia como lo normal, como lo que debe ser.  

De la imposición del poder, surge la irracionalidad; esto permitió que Calígula y Nerón, fueran emperadores; así, muchos en la historia y en la actualidad, se les equiparan. No es necesario ir muy lejos.  

Para superar tan lamentables experiencias históricas y estado actual de cosas, no se puede permitir que nadie en la izquierda trate de imponer su proyecto personal, con los mismos estilos basados en la maquinación, trasteo de votos, ocultamiento de información, manipulación de asambleas, con lo que “se reproduce la misma porquería”.  

No puede ser que el contenido de lo revolucionario, se reduzca a la retórica, al discurso, a lo mezquino. Existe una tendencia seguir al que habla y se exprese en un lenguaje medio coherente, aunque banal. Se cuelan personajillos con alguna oratoria, pero cuando se mira su relación con sus comunidades, no distan mucho del politiquero buscador de votos, del gamonal, del maltratador, del abusador, del racista, del clasista. Acciones que no tienen diferencia de sexo, por lo que también los calificativos pueden terminar en “a”.  Una pieza de oro es de oro y una de hierro, muestra la herrumbre.  

Todavía no ha pasado -llorando- la theoría de los suplicantes, de la que habló el maestro De Greiff, en el relato de Gaspar. “Mejores aires busca el espíritu”.  

Son momentos históricos que se presentan en los procesos y que los pueblos irán identificando y superando.  

Noviembre 18 de 2021  

TOMADO DE: https://columnadigital.com/ivan-duque-busca-mostrarse-como-un-lider-ambiental/

El deterioro social en Colombia puede alterar la geopolítica 

Por: Ricardo Robledo

El narcotráfico es un delito detestable; la drogadicción condena a las personas a la peor esclavitud. Los traficantes de drogas son perseguidos por los gobiernos y no hay duda de que estos sólo buscan el enriquecimiento sin reparar en escrúpulos y que son crueles delincuentes; tanto como los que invaden un país para apoderarse de sus recursos, dejando desgracias y mortandad. Por eso, cuando, desde las fuerzas que actúan de oficiales, se persigue a un capo, se entiende que es una pelea entre pillos, por los intereses económicos, por el reparto del botín, por competir quién se enriquece más rápidamente.

Contrario a lo que muchas veces se cree como ingenuo ciudadano, no existe un cuerpo rector del mundo que, en su dignidad, honorabilidad y pulcritud, trate de regir el bienestar de los países, tal como lo anuncian las constituciones y tratados, que se quedan en el engaño de papel cuando las instituciones terminan dominadas y al servicio de los más oscuros intereses económicos.

Como resultado de la fusión de intereses entre la oligarquía y el narcotráfico y su sumisión al vaivén de los intereses imperialistas, para obtener impunidad, se crean tenebrosos compromisos que cada día enredan más a los que detentan el poder en Colombia.

Las instituciones colombianas están desprestigiadas en el campo internacional, por la acumulación de sucesos de corrupción, de negocios turbios, de incidencia del narcotráfico en la política, de terrorismo de estado, fraudes electorales, pobreza, desigualdad, masacres, hambre, marginamiento.

Tal estado lamentable de la sociedad, ha llevado a que cada vez más sectores sociales capten las anomalías por vivencia propia y por empezar a comprender las causas de sus deplorables condiciones de vida. En el país, la credibilidad en la clase política está por el suelo ante hechos tan evidentes. El temor de las elites es que se produzca una revuelta social que lleve al poder a los sectores populares y cambien hasta los intereses geopolíticos.

El avance del cuestionamiento social, prende las alarmas en los sectores del poder oligárquico tradicional, que es astuto, sanguinario, minoritario, traidor, corrupto e incapaz. No es raro que ahora llamen a “ordenar la casa” y busquen deshacerse de anteriores alianzas que los involucren en los intrincados, numerosos y graves delitos de los que se lucraron y que han asolado la condición humana en el país. Para ellos ha llegado el momento de sacudirse, de señalar para otros lados, de encontrar culpables ajenos, de “hacer justicia” y de limpiarse la cara.

Es conocido que, entre los entes gubernamentales, solo se llega a acuerdos para definir bajo que pretexto, de lo que se toma como la ley, se va a perseguir a alguien que ya estorba. Tal como proceden las mafias cuando las autoridades están persiguiendo a un capo, sus mismos compinches terminan entregándolo, porque buscando a uno encuentran lo que no es y se daña el negocio.

Por eso no es de extrañar que ahora se enjuicie al matarife por un delito común, que inicialmente, sólo lo involucra a él y a sus abogados. Delito que no es político, pero que por las circunstancias sí se rodea de este contenido. Quince años atrás, cuando existía el maridaje tríptico entre narcos, oligarquía e imperialismo, las altas cortes no habrían osado judicializar al capo – por cierto, que no incidieron- por crímenes de mayor envergadura, pero que comprometen a los pesos pesados de la política y de los sectores de la economía. Ahora actúan porque seguro cuentan con el respaldo político de los que buscan limpiar las pruebas.

Parece que quien se coloca al frente de este lavado del pasado es el expresidente juan manuel santos, invitado a integrar organismos de incidencia mundial; alfil con capacidad para enredar la política, mover fichas claves y frenar a los movimientos alternativos, de cualquier forma.

Como logro adicional, la detención del capo profundiza el enfrentamiento entre la narcoderecha y la izquierda, que aparece como causante de la detención, mientras la oligarquía se hará a un lado viendo cómo se matan sus enemigos, para que no los salpique la sangre y poder pescar en río revuelto.