Angelica Monsalve Gaviria @alazamo123
El desgaste y desprestigio de las instituciones del Estado, están haciendo mella en la credibilidad que el ciudadano debería tener en éstas.
1. Una rama judicial inoperante y disfuncional, que repele la sana crítica, y que se resiste a poner orden constitucional y legal, solo para mantener sus privilegios.
2. Una rama ejecutiva lerda en comunicar y ejecutar la necesidad nacional, además de ser blanda con la simbiosis mediática-política de los gobiernos antecesores, que están desesperados por recuperar el poder a como dé lugar.
3. Una rama legislativa inmersa en un recinto de privilegios, que a semejanza de un mercado persa, negocia los derechos y las garantías ciudadanas.
4. Unos organismos de control sordos, ciegos y mudos, con sus parciales políticos.
5. Un sistema electoral cuyas acciones causan la desconfianza de la gente en él.
6. Las demás instituciones, parecieran que ni existen, pero sí representan un gasto nacional y solo las sentimos, cuando se revela un caso de corrupción.
Esta es la radiografía de lo que tenemos, y ninguno de esos poderes se colaboran armónicamente para proporcionarnos felicidad; por el contrario, se pelean constantemente para defender intereses propios y no en beneficio de los colombianos.
¡Sendas razones para estar atentos y unidos, en la próxima contienda electoral!
CUADERNOS DE REENCUENTRO 