Archivo diario: 27 febrero, 2019

Cese la agresión contra Venezuela

Por: Ricardo Robledo

La única banda presidencial de Juan Guaidó, era la banda de malhechores que lo acompañó en Cúcuta. En el transcurso de los descarados sucesos, policías colombianos observaron complacientes como unos terroristas paisas, contratados en Medellín, preparaban en sus pies bombas incendiarias para ir a quemar personas al otro lado de la frontera; tal comportamiento de una fuerza pública, es una falta de solidaridad, de ética, de sentido humanitario, es una muestra de desprecio por la vida, es una expresión de su formación y de para qué han sido entrenados por su oligarquía.

Iván Duque, presidente de narcotraficantes colombianos, decidió supervisar los desmanes en la frontera, directamente con sus acompañantes; todos esperando ansiosos frente al televisor,  el derramamiento de sangre y los cadáveres. Esta conducta de agresión, tipifica un delito en el derecho internacional. Otro despropósito es que haya recibido con honores diplomáticos al fugitivo Guaidó, para colmo de la ridiculez y de la vergüenza mundial.

Fracasaron las intentonas del último fin de semana de febrero contra la revolución bolivariana, porque chocaron con algo muy duro: el tesón y la moral del pueblo chavista. Parecen muy ilusos los miembros de la derecha regional si no contaban con esta cohesión popular y si se hacían cuentas alegres en su criminal agresión.

Pero no son tan ingenuos los paramilitares colombianos, expertos en mansalva, motosierras,  masacres y desapariciones; por eso no es de esperarse de ellos ninguna reflexión, ni conciencia, ni arrepentimiento, ni bondad, tal como ahora la banda de Lima, quiere dar a entender con comunicados en los que supuestamente se alejan de una intervención militar en Venezuela; después de lo que han atizado y considerando agotadas las instancias políticas, se lavan las manos como Pilatos, porque saben que sigue el plan B, o C, o F, de la agresión contra el pueblo latinoamericano; ataques  que habrán de continuar por encima de toda cordura y legislación, mientras el mundo mira, atónito e impotente, la cacería salvaje.

Al parecer, los Padres Fundadores del país que Duque tiene en la cabeza, nunca hablaron de Derecho, de la vida ni de la Libertad; pero Bolívar sí habló sobre la mayor suma de felicidad como propósito de un Gobierno.

No a la agresión contra América Latina. Gloria al bravo Pueblo. Una vez más, los conceptos ejemplarizantes de Patria y Libertad nacerán en Venezuela.

Febrero 26 de 2019

Análisis de los sucesos en la frontera con Colombia

https://youtu.be/3mjnobNhVQo?t=93

Grupo de Lima y UE se oponen a intervención militar en Venezuela

BEIJING, 26 feb (Xinhua)
El Grupo de Lima y la Unión Europea (UE) mostraron su oposición total a una intervención militar en Venezuela y abogaron por una solución negociada, en manos de los venezolanos y sin fuerza, tras los disturbios ocurridos este sábado en la frontera colombo-venezolana.

En una declaración tras reunirse ayer lunes en Bogotá, el Grupo de Lima abogó por una salida a la crisis «conducida por los propios venezolanos pacíficamente y en el marco de la Constitución y el derecho internacional, apoyada por medios políticos y diplomáticos, sin uso de la fuerza».

«Es bueno decir, con absoluta claridad, que el uso de la fuerza en cualquiera de sus formas es inaceptable, el uso de la fuerza no es una solución para lo que ocurre en Venezuela. Acá, en el Grupo de Lima, venimos luchando para que esta solución se dé en forma pacífica», declaró en la cita el vicecanciller peruano, Hugo de Zela.

Este rechazo se hizo, además, en presencia del vicepresidente estadounidense, Mike Pence, quien asistió a la reunión y, pese a todo, reiteró que «como ha dicho el presidente Trump: todas las opciones están sobre la mesa», además de anunciar nuevas sanciones contra Venezuela.

El Grupo de Lima, que está integrado por Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú, Guyana y Santa Lucía, fue creado en 2017 para buscar soluciones a la crisis venezolana.

Sin embargo, a la reunión de Bogotá no asistieron representantes de México, Costa Rica, Guyana ni Santa Lucía.

Al otro lado del Atlántico, Bruselas rechazaba también el mismo día la opción militar. «Se ha establecido una posición de la UE en este contexto, muy clara: hay que evitar la intervención militar», dijo la portavoz comunitaria para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Maja Kocijancic.

El ministro de Asuntos Exteriores español, Josep Borrell, era también tajante. «No todas las posiciones están sobre la mesa», dijo y señaló que su país no apoyaría y condenaría firmemente cualquier intervención militar extranjera.

Se sumó a esta corriente el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien dijo, en una entrevista con el canal suizo RTS, que «en América Latina, el tiempo de las intervenciones militares ha pasado».

Añadió que «una intervención solo podría tener lugar dentro del marco de la Carta de las Naciones Unidas», aunque sería «una ingenuidad pensar que se puede encontrar una cierta unidad en estas circunstancias».

América Latina y Europa siguen trabajando a través de múltiples vías, como el Grupo Internacional de Contacto y el Mecanismo de Montevideo, en busca de una solución pacífica a la crisis en el país sudamericano.

Durante la reunión en Bogotá, varios líderes mostraron de forma explícita su rechazo a la fuerza, entre ellos el jefe de Estado de Guatemala, Jimmy Morales, quien afirmó que para su país la solución «corresponde a los mismos venezolanos».

«Respetamos los principios de soberanía, de integridad territorial y el principio de no intervención, por lo que rechazaremos cualquier solución militar o amenaza de uso de la fuerza», destacó.

El vicepresidente brasileño, Hamilton Mourao, aseveró por su parte que «para nosotros la opción militar nunca fue una opción. Brasil siempre aboga por las soluciones pacíficas de cualquier problema que ocurra en los países vecinos. Abogamos por la no intervención».

Instó además a «actuar con responsabilidad» en un territorio «de paz» como es América del Sur y evitar medidas que puedan «confundir a nuestros países con agresores y violadores de soberanías nacionales».

En México, el presidente del país, Andrés Manuel López Obrador, insistió en la necesidad de «alejar la tentación del uso de la fuerza» y abogó por una solución dialogada y por «construir puentes de entendimiento. No querer imponer las cosas, nada por la fuerza y todo por la razón y el derecho».

Por su parte el vicecanciller uruguayo, Ariel Bergamino, afirmó que «la única salida es generar un clima favorable al diálogo y al acuerdo entre los venezolanos para salir de esta situación tan grave y, en este sentido, seguirá trabajando Uruguay».

El presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, afirmó que su país «no puede y no debe apoyar una intervención de orden militar» en Venezuela. «Es tan sencillo como eso», sentenció.

El rechazo internacional a una intervención militar extranjera en Venezuela llega después de los disturbios ocurridos el sábado, cuando la oposición intentó ingresar al país «ayuda humanitaria» sin autorización del gobierno, la ONU, o la Cruz Roja Internacional.

La propia ONU instó, a través de su portavoz, Stéphane Dujarric, a «despolitizar» el suministro de ayuda humanitaria a Venezuela y pidió a todas las partes avanzar hacia unas negociaciones políticas serias y a una reducción de las tensiones.

«La ayuda humanitaria debe ser utilizada de manera imparcial, libre de objetivos políticos o militares», declaró a la prensa.

Venezuela vive días de tensión política luego de que el 23 de enero el titular de la Asamblea Nacional (Congreso), el diputado opositor Juan Guaidó, se autoproclamase «presidente encargado» del país y fuese reconocido casi de forma inmediata por Estados Unidos.

Grupo de Lima y UE se oponen a intervención militar en Venezuela