Archivo diario: 19 abril, 2017

Momento decisivo en Norcorea: Orden tripolar de EU/Rusia/China o guerra nuclear

19 abril 2017
Alfredo Jalife
Hoy el Reloj del Día del Juicio Final está a 2:30 minutos de su medianoche (http://thebulletin.org/clock/2017) cuando se vive un momento 1962, alusivo a la crisis de los misiles en Cuba entre la URSS y EU (https://goo.gl/8eVFh5), como también aduce David Sanger (https://goo.gl/UH4lNP).
Pyongyang asegura estar preparada ante cualquier desafío impuesto por Estados Unidos.

Leon Panetta, ex director de la CIA y ex secretario del Pentágono, advirtió que Trump arriesga una guerra nuclear con Norcorea por lo que no debe incurrir en ninguna acción precipitada ya que existen “razones por las que ningún presidente en la reciente historia de EU haya jalado el gatillo (https://goo.gl/kEt5Vt)”, en lo que coincidió el representante de Norcorea en la ONU, quien acusó a EU de buscar una guerra nuclear a la que estaba preparada el régimen de Pyongyang (https://goo.gl/M7D98S).

Todo indica que las sabias intermediaciones de China y Rusia han des-escalado la confrontación cuando el portavionesUSS Carl Vinson dotado de armas nucleares, tomó una ruta diferente a la de la península coreana y ha sido detectado ahora en Indonesia dirigiéndose a Australia (https://goo.gl/NNTgG4), que está a nueve mil kilómetros de Norcorea.

¿Por qué inventaron los multimedia de Surcorea que tres portaviones de EU USS Vinson, USS Nimitz y USS Ronald Reagan se dirigían a la península coreana?

Surcorea atiza el fuego nuclear en forma infantil con fake news pretendiendo no ser afectada.

Zhao Lixin (ZL), director del Departamento de Ciencias Políticas Internacionales de la Universidad Yanbian, pese a la exhibición muscular nuclear circundante –sumada de las bravatas retóricas de EU y Norcorea–, quien juzga que “el líder Kim Jong-un no cometerá un error estúpido (sic) de proporcionar una justificación para que la Casa Blanca libre una guerra, por lo que, pese a que la mayor parte de los observadores comenta que la península coreana se acerca a su punto más volátil, la posibilidad de una guerra es escasa (sic).

ZL aduce que Trump no actuará en forma intempestiva porque no puede vislumbrar hasta qué punto China y Rusia intervendrán una vez que la guerra estalle ni podrá predecir sus consecuencias cuando “China y Rusia no son extraños y la península coreana no es Siria (https://goo.gl/XvJSkC)”.

La Casa Blanca ha diluido su vino y su portavoz Sean Spicer comentó que Trump no trazará ninguna línea roja (sic) en la península coreana sobre el tema nuclear cuando EU continúa colaborando con China (https://goo.gl/5wJ6Kj).

China maneja una propuesta persuasiva, que se conoce como la suspensión de la suspensión, donde resalta suspender las hostilidades: primer paso, que Norcorea congele su programa nuclear a cambio de que EU suspenda sus ejercicios militares con Surcorea (https://goo.gl/DLlepm).

El petrolero texano y secretario de Estado, Rex Tillerson, prefiere esperar el resultado electoral de Surcorea el 9 de mayo para el despliegue del escudo misilístico balístico de defensa estadunidense (THAAD).

Surcorea no pasa su mejor momento cuando su presidenta Park Geun-hye ha sido encarcelada y cursa una elección muy apretada que definirá la instalación del THAAD. Ahora Beijing presiona simultáneamente a Pyongyang y a Seúl.

El portal chino Global Times inculpa también a Seúl de la crisis nuclear al jugar con la perspectiva de instalar el escudo THAAD en su suelo cuyo objetivo es tanto contra Norcorea como contra China y que pudiera constituir una pieza de recambio para la desnuclearización integral de la península coreana.

Son delicadas pero no son tan dramáticas las noticias y, como aduje en mi entrevista a CNN (https://goo.gl/S3eNlm), la cumbre de Trump y el mandarín Xi fue relativamente exitosa en Mar-a-Lago, donde se acordó la cooperación de China y EU para salvaguardar la paz en la península coreana y en todo el noreste asiático (nota: China, Japón y la península coreana), según Global Times.

China advierte que Surcorea tome el peso de las consecuencias de las tensiones en la península cuando apuesta en forma ilusa “a una confrontación entre Beijing y Pyongyang (https://goo.gl/HOuGK4)” en la que Seúl no será ninguna víctima inocente de la crisis nuclear de Norcorea.

El portal chino llama la atención a Surcorea de que seguramente sufrirá las consecuencias de una guerra, por lo que Seúl no debe fantasear (¡súper-sic!) en un escenario de que se colapse el régimen de Pyongyang durante la guerra y que Surcorea pueda unificar a la península en el proceso.

También el vicepresidente Mike Pence criticó, en este momento tan crucial, el déficit comercial de EU con Surcorea (https://goo.gl/DVvTox), lo cual delata que Seúl recibe fuertes presiones por andar atizando el fuego nuclear.

La des-escalada en la península coreana generará mejores condiciones para una cooperación de EU y China de la que no puede ser excluida Rusia, genuina superpotencia nuclear que comparte 18 kilómetros con Norcorea (China comparte mil 352 kilómetros) cuando Moscú mantiene excelentes relaciones con Japón, al igual que Beijing las tiene con Surcorea, en este contexto tripolar de hipercomplejidad no lineal.

El contencioso de Norcorea es anacrónico desde hace 64 años y se ha gangrenado como rescoldo no resuelto de la Segunda Guerra Mundial cuando el general MacArthur pretendió lanzar una lluvia de bombas nucleares, lo cual indispuso hasta al presidente Truman que ya había ordenado el lanzamiento de dos bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki.

El contencioso norcoreano había avanzado con los presidentes Carter y Clinton. Hoy Trump se burla de que Clinton y Obama no pudieron resolver nada.

A mi juicio, a Clinton le faltó tiempo, y el belicoso BabyBush echó a perder todo lo conseguido cuando colocó en forma innecesaria a Norcorea en la lista de los Estados canalla.

Recuerdo la comida a la que nos invitó el canciller mexicano, Luis Ernesto Derbez, al egipcio Mohamed El Baradei, director de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), que obtuvo el Nobel de la Paz en 2005, y a su asistente, la física mexicana, Ana María Cetto, con un servidor en representación de la Asociación Internacional de Médicos para la Prevención de la Guerra Nuclear galardonada con el premio Nobel de la Paz de 1985. El Baradei nos confió que Norcorea poseía ya seis bombas nucleares.

A partir de entonces BabyBush y Obama han empujado a Norcorea contra la pared que, como fiera (https://goo.gl/PiqVng), dotada hoy entre 13 y 21 bombas nucleares (https://goo.gl/71wmf3), en caso de asfixia desmedida podría optar por un contrataque contra Surcorea, Japón y las respectivas bases de EU.

En China no pierden la esperanza de un arreglo cuando el mandarín Xi no ha cancelado la trascendental cumbre de 28 mandatarios, los próximos 14 y 15 de mayo en Beijing, entre quienes se encuentra el zar Vlady Putin (https://goo.gl/9MZPLz).

Suena creativo el quid pro quo de la desnuclearización de la península coreana que incluya el desmantelamiento del THAAD en Surcorea y lleve a su unificación al estilo alemán.

A mi juicio, la península coreana unificada debe ser neutral y constituir un país amortiguador bajo el paraguas tripolar de China, EU y Rusia.


http://www.telesurtv.net/bloggers/Momento-decisivo-en-Norcorea-Orden-tripolar-de-EURusiaChina-o-guerra-nuclear-20170419-0002.html

 

Brigadas internacionalistas ante la amenaza a Venezuela

– Por Luis Bilbao

Si se animarán o no, es difícil predecirlo. En todo caso, el clima está creado para lanzar en las próximas horas un golpe de Estado en Venezuela. Urge movilizar brigadas internacionalistas para evitar la agresión de Washington.

Esta vez fue la OEA el centro de la operación calumniosa enderezada con precisión a justificar acciones violentas contra el gobierno de Nicolás Maduro. El centro de operaciones se desplazó de la prensa conservadora del hemisferio al redivivo Consejo de Indias. Diarios, radios y canales de televisión actuaron en esta oportunidad como segunda línea de ataque.

Fue de tal contundencia la respuesta del gobierno venezolano, la Fuerza Armada (¡y ahora la burguesía parece haber tomado nota de la existencia de las milicias populares como quinto componente de esa poderosa muralla en defensa de la Revolución!), que parece más probable que los hombres de gris del Departamento de Estado indiquen a su jefe, quien a su vez ordenará al presidente estadounidense y de paso anoticiará al Malinche uruguayo encaramado en la OEA, la inconveniencia de activar los grupos paramilitares sembrados en territorio venezolano.

No obstante, es de tal magnitud el disloque del poder establecido en Washington, que nadie podría esbozar con base sólida un pronóstico inmediato. La irracionalidad general del sistema es un punto de partida. No obstante, por regla general se podía confiar hasta cierto límite en la racionalidad puntual de los estrategas burgueses. Hoy, eso es imposible. Éste es un dato relevante de la coyuntura mundial.

Por eso, cabe caracterizar como lúcida y valiente la conducta de Nicolás Maduro y el conjunto de cuadros civiles y militares que ante la coyuntura se ha abroquelado -acaso más que nunca- en torno a él, como símbolo de la continuidad institucional y pacífica (en términos relativos) de la Revolución Bolivariana.

 

Vergüenza

Un sentimiento de vergüenza domina a cualquier revolucionario/a argentino ante el papel de su país en esta coyuntura de extrema gravedad para la región. No porque se pudiera esperar algo diferente de gobernantes encabezando la operación de la OEA y opositores burgueses -e incluso híper izquierdistas- callados como momias ante el despliegue contrarrevolucionario contra Venezuela. No. La verdadera causa de vergüenza es que la inconmensurable masa de activistas y cuadros con conciencia antimperialista no logre tomar cuerpo y aparecer como actor protagónico en el escenario continental.

Desde nuestro lugar, culpar a Mauricio Macri o a la oposición de su majestad por el papel de Argentina en el cuadro continental es pura charlatanería. Cobardía encubierta con palabras.

Macri, su cohorte de burgueses y el neoreformismo que lo secunda, hacen lo que hacen porque pueden. Y pueden por la omisión de quienes nos identificamos con la unión latinoamericana, con la lucha antimperialista y anticapitalista.

Mientras se redactan estas líneas Cambiemos pretende llamar a una sesión de la Cámara de Diputados para cargar también desde allí tras la perspectiva de atacar a Venezuela. Probablemente fracasarán. En tal caso, habrá una prueba más de la fuerza latente bajo la superficie infecta de la política burguesa.

Contamos con enorme fuerza objetiva para imponer una política internacional diferente. Pero carecemos de la capacidad subjetiva para hacerlo. Y esa carencia deviene de flaquezas teóricas y desvíos en la práctica demasiado obvios, demasiado repetidos a lo largo de medio siglo como para no asumirlos ya, sin demora ni rodeos.

 

A la acción

Un primer paso para salir de esta encerrona es asumir la necesidad de salir en todos los terrenos a la defensa de La Verdad de Venezuela.

Desde la prensa burguesa se miente hasta lo insoportable respecto de la realidad del país de Hugo Chávez. Se miente sobre la situación sin duda grave a la que ha llevado la guerra económica y la caída del precio del petróleo. Todo se carga a errores de la conducción económica del país hermano. Nadie con formación teórica revolucionaria podría negar errores –incluso graves- en esa área. Nadie con un mínimo de sinceridad y conocimiento podría desconocer que esos errores ocurrieron en el marco de un esfuerzo sin parangón por paliar los efectos devastadores del sistema capitalista que empobreció y marginalizó a la mayoría de la población.

Los críticos burgueses parecen desentenderse del hecho de que con políticas conceptualmente opuestas –es decir, a favor del capitalismo- en Argentina tenemos desde hace dos décadas un tercio de la población bajo la línea de pobreza. Para no hablar de la catástrofe social en Brasil, México…

Muy lejos de eso está Venezuela. Y las dificultades inmensas, las penurias económicas extremadamente riesgosas que afronta, devienen de las contradicciones propias de una transición al socialismo en un mundo dominado por el mercado capitalista y con larga hegemonía del pensamiento conservador y reformista.

No es difícil crear de a por miles brigadas internacionalistas para salir a decirle a Argentina la Verdad de Venezuela. Hay información suficiente para contrarrestar la catarata de mentiras y calumnias de la burguesía. Es simple comparar las limitaciones económicas de Venezuela con el cataclismo social en curso en Argentina, Brasil, Colombia, Chile y Venezuela, Uruguay, Perú, Paraguay, aunados ahora para condenar a la Revolución Bolivariana. Tampoco Estados Unidos resiste una comparación en la dinámica de caída del nivel de vida de las masas.

Organizarse para difundir la verdad es un compromiso urgente que nadie debería eludir.

@BilbaoL

Argentina, 18 de abril de 2017